Han pasado un par de horas desde que el Gato Negro regresó a su campamento, derrotado, pero tratando de convencerse a sí mismo que de alguna manera emergió victorioso por el simple hecho de haber aprisionado a unos cuantos Cubs durante su huida. Uno de los capturados durante la conmoción en la aldea Cub tiene información y ha pedido hablar con el said; Zachar accede a recibirlo, y pronto se da cuenta que no es un Cub sino un Turanio que dice saber como derrotar a Orión. Los ojos del Gato Negro brillan con malicia y le ordena al prisionero que siga hablando.Se trata nada más y nada menos que de Gudas, quien por fin ha encontrado una oportunidad para deshacerse de Orión y desquitarse de él por haberle arrebatado el corazón de su amada. Cuando Zachar le pregunta cual es la forma de derrotar al extranjero, Gudas le explica que le pueden tender una trampa utilizando a una persona como carnada; esa persona es Eva! La joven turania también fué capturada durante el combate, y Gudas está convencido que si la usan como anzuelo para destruir a Orión y quitarlo del camino, él por fin podrá quedarse con ella.
El Gato Negro reconoce el valioso servicio que el Turanio le ha prestado, y ofrece darle lo que quiera en recompensa. Gudas solo pide quedarse con Eva después que Orión muera, pero su plan le falla, pues al ver a la voluptuosa e irresistible Eva, Zachar ha decidido que la quiere para que sea parte de su harén. Gudas trata de pelear al darse cuenta del error que ha cometido, pero es inútil, porque su captor es mucho más poderoso. Los mercenarios sacan al Turanio de la tienda, y el said se queda a solas con la prisionera. Esta noche, el Gato Negro la hará suya por la buena o por la mala!
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