La valiente Noraya apenas tuvo suficiente tiempo y fuerzas para dar un grito de advertencia a su novio antes de recibir una puñalada fatal. El amentiano había planeado una embozcada para asesinar a Orión; pero gracias a la desesperada advertencia de Noraya, Orión y sus amigos Tatos y Rulio pudieron darse cuenta de la trampa.
Después de una intensa lucha en los jardines del coliseo, Orión y Tatos triunfaron, Rulio murió, y los amentianos fueron derrotados; pero el cobarde que atacó a Noraya y planeó la embozcada escapó entre las sombras sin ser descubierto. Cuando Orión por fin logró alcanzar a Noraya, ya era demasiado tarde... ni siquiera los poderosos chacras podían salvar su vida. Con su último aliento, Noraya explicó a Orión que había sido usada como carnada para asesinarlo, y que su atacante era un amentiano con un tatuaje en forma de estrella en su hombro, y con esto, la hermosa Noraya murió.
Al mismo tiempo que Noraya moría, los primeros temblores comenzaron a sentirse en la Atlántida; era el comienzo del fin. En ese momento Orión fué convocado por Serapis para participar en el Torneo para elegir al Supremo Regente. El recuerdo de la bella Noraya seguiría a Orión por muchos años, sin saber que un día se encontraría frente a frente con el hombre que le quitó la vida.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario